P.- He oído hablar de un Decreto que va a salir, regulando temas económicos en las Hermandades y me estoy temiendo lo peor. ¿Conoce usted algo de ese Decreto?, ¿sabe cuándo se publica?, ¿va a imponer nuevas obligaciones a las Hermandades?
R.- Algo sé; pero no es nada por lo que haya que alarmarse. Se trata de un Decreto Diocesano por el que se crea un Protectorado Canónico que tiene como finalidad velar para que todas las entidades de la Iglesia Diocesana cumplan fielmente la legalidad que les afecte, sea ésta civil o canónica.
Las entidades a las que alcanza este Decreto son: las Parroquias; las Asociaciones, aquí se incluyen las Hermandades y Cofradías; las Fundaciones Pías; el Cabildo Catedral y los Organismos Diocesanos Autónomos, como Cáritas o Manos Unidas.
El Protectorado engloba a los responsables de tres órganos de la Archidiócesis: la Secretaría General y Cancillería, la Delegación Episcopal para los Asuntos Jurídicos de las Hermandades y Cofradías y la Administración General Diocesana. De lo que se trata es de regular la presentación de cuentas, presupuestos y demás documentación exigida por la normativa vigente, y que ésta se haga con criterios uniformes. Tiene también funciones de asesoramiento y apoyo técnico.
Hay que tener en cuenta que la Ley 19/2013, de 9 de diciembre, de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Buen Gobierno, impone a las entidades privadas que reciban ayudas o subvenciones públicas, como es el caso de la Iglesia Católica, la presentación de sus cuentas y el acceso público a las mismas. Que la Ley 10/2010, 28 de abril, de Prevención del Blanqueo de Capitales impone también determinadas obligaciones a las Fundaciones y Asociaciones (no olvide que las Hermandades y Cofradías son asociaciones) y que la Ley Orgánica 1/2015, de 30 de marzo, por la que se modifica el Código Penal, no exime de responsabilidad a las entidades religiosas.
Le enumero estas leyes para que entienda que este Decreto no es una idea de la Curia para “controlar” a las Hermandades y Cofradías, sino una ayuda para unificar criterios y evitar problemas a todas las entidades que dependen de la Iglesia, además de ser ejemplares en el cumplimiento de la legalidad vigente, como corresponde.
Imagino que se publicará en enero, para hacerlo coincidir con el comienzo del año y del ejercicio económico. Imagino también que se presentará a los medios y ahí se aclararán todas las dudas. Pero ya le digo que es un Decreto que viene a ayudar y dar seguridad jurídica a las Hermandades, no a imponer obligaciones nuevas.
El mes que viene, cuando se publique, ya lo comentaremos en detalle.
Deja una respuesta